Jessica, parte del equipo RUF, comentó: “La experiencia me encanta, ya vamos tres años. Aprendemos muchísimo más allá de lo profesional y de lo práctico. Estamos felices, porque este intercambio cultural nos ha abierto la mente y esperamos poder continuar los vínculos con Shay al igual que lo hacemos con todos los alumnos que hemos recibido en estos años”.
Por su parte, Shay Chowdhury dijo, desde EE. UU.: “Esta pasantía me ayudó a crecer porque me puso en una situación desconocida y tuve que adaptarme y trabajar con los demás, también tuve que trabajar con algo que nunca había visto antes. Esta experiencia me ayudó a crecer al permitirme desarrollar aún más mis habilidades para la resolución de problemas”.
Las experiencias académicas que suman pasantías en empresas asociadas a las carreras de los alumnos, otorgan valor agregado al crear vínculos más allá de lo estrictamente curricular. Poder brindar ese espacio de primer contacto con el mundo laboral, aplicar los conocimientos adquiridos en la universidad a situaciones reales y saber cómo desenvolverse en futuras relaciones profesionales es un incentivo que debe ser valorado y mantenido en el tiempo. De esta interacción todos somos beneficiados, tanto el alumno que nos interpela en las prácticas diarias de nuestra labor como los profesionales que se conectan nuevamente con sus dudas, procesos y aprendizajes. Recibir a Joel con su cultura, dejó huellas intangibles en los compañeros que trabajaron con él. Esperamos haber incrementado y acentuado el amor por la carrera que ha escogido para transformar su mundo desde el ámbito laboral” afirmó Carina, representante de la empresa Bitsion.
Por último, Joel Anaghara comentó que para él esta experiencia fue muy positiva porque más allá de tener que realizar actividades complejas con plataformas que quizás no habían utilizado hasta el momento, todo se dio de manera muy dinámica y ayudo a que sea una experiencia “stress free”.